La UE está obsesionada con reducir la migración

  • septiembre 13,2018

Un estudio revela que Europa no ha encontrado una 'respuesta sostenible' a la crisis migratoria de este verano, sino que ha intentado reducir la migración "sin importar las consecuencias morales, legales ni humanitarias".

El departamento 'Criminologías fronterizas' de la Universidad de Oxford ha entregado en exclusiva una nueva investigación a Euronews. Su análisis ha provocado muchas críticas sobre cómo la UE ha lidiado con la crisis migratoria este verano y con los barcos de rescate gestionados por organizaciones no gubernamentales (ONG).

A través de su estudio, basado en los datos de la ACNUR y de la OIM, los investigadores descubrieron que el número de ahogamientos aumentó fuertemente, así como las restricciones de las operaciones de búsqueda y rescate organizadas por las ONG en junio y julio.

Mientras que en abril se registraron 20 muertes y 11 en mayo, en junio el número ascendió a 451. Estas pérdidas tuvieron lugar en un momento en que las "salidas eran comparativamente bajas".

"Aunque cada uno de estos acontecimientos individuales ha sido reportado en otros lugares, en conjunto muestran la determinación que tiene Europa de cerrar sus fronteras y de luchar contra la migración irregular, sin importar el costo (humano)", concluyeron los autores del informe.

"Las tres tendencias descritas anteriormente muestran la dura realidad de las políticas migratorias recientes, que tratan de frenar la migración irregular sin importar las consecuencias morales, legales ni humanitarias. La obsesión que tiene Europa actualmente por reducir la migración a toda costa es aún menos comprensible cuando se observa la disminución drástica de las llegadas antes del aumento más reciente de la retórica y la externalización del control de la migración".

El cambio de política de la UE fue encabezado por el nuevo ministro del Interior italiano, Matteo Salvini,quien acusó a los barcos de rescate de las ONG de contribuir y ayudar a los contrabandistas de personas.

El 10 de junio, Italia declaró que cerraba sus puertos a los barcos de rescate de las ONG y, durante un tiempo, a los barcos comerciales con migrantes rescatados, explicando que Italia ya no soportaría las consecuencias de la migración irregular.

Esto condujo a una crisis política en toda la UE, ya que 630 migrantes quedaron varados a bordo del buque Aquarius durante una semana. El barco fue finalmente autorizado a desembarcar en Valencia, después de que España aceptara a los migrantes.

El Aquarius se convirtió en el símbolo de las restricciones hacia los barcos de rescate de las ONG este verano. Las autoridades de Malta incautaron el buque de rescate "Mission Lifeline" y emprendieron acciones legales, afirmando que el capitán había infringido la legislación marítima maltesa, hecho que él niega. Varios barcos de las ONG no pudieron operar de junio a julio a causa de las tensiones políticas con respecto al tema en todo Europa.

Matteo Salvini continua defendiendo su postura. Además, ha cedido la responsabilidad a la Guardia Costera de Libia en numerosas ocasiones. Durante un viaje a Trípoli, Salvini prometió un mayor apoyo político y financiero a las autoridades libias.

Sin embargo, los investigadores han creado un mapa que muestra los naufragios mortales que sucedieron cuando los barcos de rescate de las ONG casi no podían operar. Descubrieron que muchos de ellos ocurrieron muy cerca de las costas libias, "a menos de 50 millas náuticas".