La actriz y activista estadounidense Mia Farrow visitará la Amazonía ecuatoriana para comprobar la contaminación que dejó Chevron

  • enero 26,2014

La actriz estadounidense Mia Farrow llegó a Ecuador este domingo para visitar el próximo martes el pozo Aguarico 4 en la Amazonía ecuatoriana y comprobar el desastre ocasionado por la transnacional petrolera Chevron-Texaco.

Farrow llega al país para unirse a la campaña La Mano Sucia de Chevron, impulsada por el país suramericano y visibilizar ante el mundo la contaminación causada por la transnacional.

La actriz, además de tener una gran trayectoria en la pantalla grande también es una activista de causas humanitarias. En 2010, fue nombrada Embajadora de Buena Voluntad de Unicef por sus actividades humanitarias en pro de la niñez. Farrow ha visitado países como Angola, Chad, Haití, Nigeria o el Congo para recoger fondos y promover los derechos de los niños afectados por conflictos armados.

En 2009, Farrow visitó el Territorio Palestino Ocupado e Israel para crear conciencia sobre la situación humanitaria de los niños afectados por el conflicto en la región, a ella se le unió Mahmoud Kabil, actual embajador regional de Unicef. Con anterioridad a la visita, Farrow hizo un alto en Jordania donde se encontró con la Reina Rania Al-Abdullah, promotora eminente de este organismo en pro de la infancia.

Por sus valioso aportes y esfuerzos humanitarios, la actriz recibió el galardón Marian Anderson, en nombre de madres y niños en los países afectados por los conflictos y la violencia. Asimismo el Museo del Holocausto en Houston (Estados Unidos), otorgó a Farrow el premio Lyndon Baines Johnson Moral Courage de 2011 por su labor humanitaria.

De la misma forma que otras personalidades internacionales como Danny Glover, Alexandra Cousteau, Luis Eduardo Aute y Jean-Luc Mélechon, Mia Farrow llega al Ecuador para solidarizarse con el país y unirse al apoyo internacional frente a esta causa.

Durante 26 años, entre 1964 y 1990, la petrolera estadounidense Chevron-Texaco explotó el crudo ecuatoriano, en lo que hoy son las provincias amazónicas de Sucumbíos y Orellana. Tras su salida del país, la empresa dejó en aquella zona pasivos ambientales contabilizados en más de 18 millones de galones de desechos tóxicos vertidos en ríos y riachuelos.

En el fallo de última instancia en Ecuador, la petrolera estadounidense fue condenada a pagar USD 9.511 millones. La sentencia ratifica el fallo emitido por la Corte de Sucumbíos, aunque redujo el monto a pagar por parte de la petrolera a los ciudadanos afectados por la contaminación ambiental que, según peritos internacionales, Chevron dejó en la Amazonía del país suramericano.

Fuente http://www.andes.info.ec/