Estación Charles Darwin, 50 años en las Galápagos

  • febrero 10,2014

A finales de los años 50, el mundo científico había posado su mirada en la megadiversidad natural del archipiélago de Galápagos. Misiones de observación –como la de 1954, del austriaco Irenäus Eibl-Eibesfeldt, del Instituto Max Planck de Alemania– daban cuenta de su exuberante flora y fauna, pero también de sus pobres posibilidades de supervivencia si no se daba un cuidado adecuado.

Ante la preocupación, la comunidad científica recomendaba al Ecuador la declaratoria de Parque Nacional para las islas –pese a que esto ya se había dado en 1936, en el gobierno de Federico Páez– y el establecimiento de una estación científica que genere conocimiento para proteger la biodiversidad.

Por esos años, la necesidad de conservación de la vida silvestre era poco comprendida en Galápagos. Las tortugas gigantes (Elephantopus geochelone) eran sacrificadas para alimentación de los colonos y sus crías se vendían como mascotas. Las ratas y los animales domésticos introducidos, que se volvieron salvajes, depredaban la fauna local, mientras las cabras devastaban la vegetación de la que se alimentan las emblemáticas tortugas.

Para 1950, el primer censo poblacional en las Galápagos reveló que había 1.346 personas habitando los 7.882 km² de superficie de las islas. Seis décadas después (2010), el registro poblacional ubicó a 25.124 habitantes divididos en tres cantones. En respuesta a esta presión internacional liderada por la Unesco y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, se crea en 1959, en Bélgica, la Fundación Charles Darwin (FChD). El nombre se escogió en honor al naturalista inglés que en Galápagos confirmó su teoría sobre la evolución de las especies.

Paralelamente a este hecho se concretó la creación del Parque Nacional Galápagos (PNG) como zona protegida, pero solo fue hasta 1968 que entró en operación el lugar. Según la Ley Especial de Galápagos, el 97% del territorio insular debe ser parque nacional y solo el 3% para crecimiento urbano.

La necesidad de tener un brazo operativo de la FChD en el archipiélago hizo que en 1960 se iniciara la construcción de la Estación Científica Charles Darwin (ECChD). El 20 de enero de 1964 esas instalaciones en Puerto Ayora, en la isla Santa Cruz, fueron inauguradas y en menos de un mes se publicaba en el Registro Oficial 181 el acuerdo entre la FChD y el Gobierno, con el cual se definían las normas de funcionamiento para la estación investigadora.

Inmediatamente, cuenta Swen Lorenz, director de la FChD en Ecuador, la estación se transformó en el mayor asesor científico y técnico del Estado en Galápagos y principalmente del PNG, pues proporcionaba la investigación necesaria para enfrentar amenazas sobre flora y fauna de las denominadas Islas Encantadas.