El juez ecuatoriano Carlos Vera dejó en alto al arbitraje del país al estar en la final Mundial Brasil 2014, que se disputó este domingo en el mítico estadio Maracaná de Río de Janeiro.

El réferi tricolor dirigió los partidos entre Nigeria e Irán del Grupo F y el duelo entre Costa de Marfil y Grecia por el C. El buen desempeño de Vera le permitió ser considerado como el cuarto árbitro de la final entre Argentina y Alemania.

El ecuatoriano formó la cuarteta arbitral, comandada por el italiano Nicola Rizzoli y que fue asistido en las líneas por sus compatriotas Renato Faverani y Andrea Stefani.

Además de Vera, otro juez ecuatoriano figuró entre los árbitros de la final, debido a que el asistente Christian Lescano constó como reemplazante de uno de los líneas en caso de una lesión.

Vera fue el tercer juez central del país suramericano que pita en un Campeonato del Mundo, luego del fallecido Elías Jácome en Italia 1990 y de Byron Moreno en Corea y Japón 2002.

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